Para comenzar la charla, Ochoa Sánchez hizo un repaso de la actividad que lleva adelante AIEJA:

“Nuestra empresa representa a algunos de los permisionarios de casinos autorizados por la SEGOB, a operadores y a la proveeduría de la industria, desde fabricantes hasta quienes hacen mesas de juego, capacitación de dealers y croupiers. Nuestra función es una representación de carácter general, es decir, no representamos los intereses individuales de ningún socio. Los temas más importantes son los que tienen que ver con el gobierno federal, ya sea la Secretaria de la Gobernación, que es el regulador; la Secretaría de Hacienda, que es la que nos cobra los impuestos; la Secretaría de Turismo, para fomentar el crecimiento del sector; la Secretaría de Salud, para el tema de la autorización para fumar en una parte de las salas y la prevención de la ludopatía; o sea, todas las secretarías, inclusive el tema de la seguridad. Y también tenemos una representación ante el poder legislativo, concretamente ante la Cámara de Diputados y Senadores, y ante el Poder Judicial, que es cuando hay alguna controversia con la Corte Mexicana”.

“También tenemos representación ante las autoridades de los estados y de los municipios, que es como se divide geográficamente el territorio nacional, en donde se concentra la mayor parte de los casinos. No estamos en todo el país, pero estamos en una buena parte de las entidades federativas de México. Luego también ante órganos colaterales, como Asociaciones, Cámaras de Comercio. Además somos los voceros de la industria mexicana del sector ante los medios de comunicación. Tenemos también la representación de la industria a nivel nacional e internacional”.

“Tenemos una vida muy activa. Nuestra asociación, cuyo máximo órgano de gobierno es la asamblea, tiene comisiones, por ejemplo, para el tema de una nueva ley de juego, o para un tema fiscal, o el tema de medios de comunicación, o relaciones gubernamentales. Las asambleas las integran los propios socios de manera honorífica, y tienen una vida muy activa, que me permite a mí como presidente tener un contacto de forma permanente con mis asociados”.

“Hoy la AIEJA representa a más de 40 socios que son permisionarios, proveedores, operadores, fabricantes, y tenemos una gran comunicación con las autoridades del gobierno federal, concretamente con la autoridad reguladora, para darle un desarrollo y un cambio de imagen al sector, que lamentablemente se ha visto muy perjudicado por las películas estadounidenses que hablan mal de él. Intentamos tener comunicación con los periodistas más importantes de México y también a nivel internacional”.

¿Cómo ve el mercado mexicano con respecto a la industria de juegos de azar?

Es muy incipiente; muy nuevo. Se aprobó el reglamento en 2004 y se empezaron a dar los permisos a partir de 2006 y 2007, por lo que es una industria que tiene menos de 11 años y que ya le ha tocado vivir de todo: el incendio del casino en Monterrey, que fue terrible para el sector, revocaciones de permisos por parte de la autoridad federal, cierre de muchos casinos ilegales (que está muy bien, por supuesto). A pesar de todo, la industria va creciendo, está muy fuerte y consolidada y la vemos con un gran futuro de expansión. Este es un año electoral para México, dentro de 2 meses tenemos una nueva elección presidencial, entonces dependerá de quién gane y qué visión tenga de la industria si podremos seguir creciendo. Tenemos una gran expectativa de que en los próximos 10 años la industria pueda no sólo duplicarse sino hasta triplicarse o más, porque las condiciones políticas, geográficas, hasta climatológicas de México son muy favorables, sobre todo en un entorno de acercamiento a la economía más grande del mundo, que es la de los Estados Unidos.

¿Cómo ve la realización de este tipo de eventos en México?

México estuvo un poco aislado de este tipo de actividades. Lo máximo que llegó a tener fue un evento llamado ELA, que era una exposición de máquinas que se hizo desde 2008 a 2012, y luego paró. Ya no hubo actividad. Realmente cada quien se movía por su lado o tenían que ir a actividades internacionales. Vino un evento circunstancial que fue la Cumbre Iberoamericana de Reguladores del Juego, que tuvo como sede a la Ciudad de México en 2016. Ahí se activó mucho el sector, y el año pasado ya hicimos una convención nacional del juego, aprovechando la base de información de 2016, nos fue muy bien. Este año la hemos pospuesto para febrero o marzo del año próximo, dado que en noviembre está terminando el gobierno actual y en diciembre entra el gobierno nuevo. Actualmente hay una gran actividad, en medio de este tema que es la sede del Caribbean Gaming, que se organiza en Puerto Rico, en Aruba, Jamaica, y que viene para México, despertó gran inquietud. Muchos vinieron no a exponer sino a ver, a conocer. Pero seguramente se agregarán como expositores el año próximo que será otra vez la sede aquí, y debe irle muy bien al Caribbean Gaming Show para el año que entra, que es en Cancún. Cuando Elizabeth Leiva nos planteó el tema lo vimos con gran interés, la apoyamos con todo y creemos que el resultado de esta exposición está siendo bastante exitoso no sólo para la parte mexicana sino para toda la región, incluso con presencia de Latinoamérica, de Europa, de Asia, y eso es importante.

¿Cuál es su opinión acerca del juego online y las apuestas deportivas para México?

Ahí estamos muy rezagados. México no ha actualizado su legislación con respecto al juego online. Hoy el 60% de las apuestas deportivas online en México no están controladas por el gobierno mexicano; sólo el 40% a través de grupos fuertes como Caliente, Play City. Entonces yo creo que ahí sí el gobierno tiene que dar un paso adelante para regularlo, controlarlo, tener una base de recaudación de impuestos, generar empleos en el país, controlar las edades de los jugadores, etc. En ese sentido, creo que hay un reto muy importante para las autoridades tanto del gobierno de turno como del gobierno próximo. El futuro de México en el tema legal tendrá que aprobar una nueva legislación, que no existe, como en cuanto al juego online, la clarificación del juego en vivo y la regulación de los fabricantes. Yo creo que son los tres grandes retos que tiene la autoridad. Y obviamente, ordenar el tema fiscal, porque México está desajustado en este tema. Necesitamos ordenar ese tema y en eso estamos trabajando. Con una nueva ley y un ordenamiento del tema fiscal la industria debe ir para adelante.

¿Está haciendo algo el regulador de México para aggiornarse con todos estos cambios?

El actual regulador, que lo acaban de cambiar (hubo cambio de Secretario de Gobernación en enero), tiene margen pequeño, son diez meses, y en ese lapso le toca controlar la seguridad del tema electoral, está preocupado por el tema, nos ha encargado estudios y estamos colaborando en los lineamientos, revisando incluso el tema fiscal. No podremos lograr una reforma trascendente porque el tiempo político no lo permite, pero sí una reforma que le dé la viabilidad hacia un camino más certero en los próximos años.

¿Cambia el regulador con el cambio de gobierno?

Seguramente sí. Al llegar el nuevo gobierno federal, lo más probable es que el nuevo presidente designe un nuevo regulador. Ese es un peligro tal vez para nuestro país porque en el sexenio pasado hubo 6 reguladores; en ese ya van 3, y en cambio en Perú el regulador tiene 11 años, casi 12, lo cual da una enorme estabilidad al juego en el Perú. En México tiene que haber alguien más estable, que además no lo designe el presidente sino el congreso, y que no sólo esté en la Secretaría de la Gobernación, que es un organismo regulador y que tiene que ver con seguridad, sino en economía y turismo, que tendría que ver más con fomento de la inversión y la atracción del turismo para nuestro país.

¿Cuáles son los objetivos para IEJA para este año?

Consolidar el sector, ayudar a la SEGOB en estos dos temas, el tema de dejar más claras las cuentas en materia fiscal y en materia de definición de otorgamiento de permisos y su regulación, y mantener ante los medios de comunicación una imagen mucho más real de lo que es nuestro sector de juego. También estar en contacto con quien vaya a ser el presidente de la república, electo en julio, y su equipo de transición para informarle de lo que estamos haciendo, para no empezar de cero cuando asuma.